Hace muchos, muchos años un conejo gordo, caprichoso y alegre llamado Andreola quería hacer una cosa que no era normal para sus amigos del pueblo. Estaba aburrido porque siempre hacía lo mismo y quería marcharse para siempre al espacio, conocer otro tipo de cosas. Sus amigos le repetían una y otra vez: “Andreola, no vayas al espacio que no hay nada, no tienes familia allí ni a nadie con quien jugar, tu vida será más aburrida que ésta, ya lo veras”.
-Calla charlatán, ya sé que me lo dices por mi bien, pero tú sabes que yo soy muy caprichoso y lo que quiero lo consigo.
El conejito fue a su casa de paja, hizo la maleta, se despidió de su familia y se dirigió a su nuevo hogar. Al cabo de minutos, horas y años Andreola llegó al espacio, y se dijo a sí mismo: “¿Pero qué es esto? Todo esta flotando y yo me caigo por todas partes ¡qué chupi, esto me encanta!” Andreola se fue para ver donde se iba a instalar, entonces vio un sitio llano y perfecto para él. Al cabo de meses Andreola estaba flaco y deshidratado, no tenia fuerzas ni ganas de vivir.
-¡Jolín! Le tenia que haber hecho caso a mi amigo. ¡Si es que soy tonto! –se decía a si mismo
De pronto vino una conejita muy guapa y le dijo a Andreola:
-Te he estado espiando toda esta semana y veo que no estás muy contento. Yo creo que te deberías de ir a tu país porque aquí no eres feliz.
-Creo que tienes razón, necesito a mi familia y algo de comer para seguir en pie.
El conejo dio rumbo a su nuevo destino y al final llegó.
-Pero, ¿que haces aquí hijo mío?
-Pues ya ves mamá, en el espacio no había nada para comer y ya sabes que yo necesito alimentarme y a alguien con quien jugar.
– Me alegro de que hayas venido.
Andreola fue a ver a su amigo y le dijo:
-Con esto he aprendido a ser menos caprichoso y a hacer caso a la gente.
-Bueno, por lo menos me alegro de que hayas ido porque has aprendido las consecuencias que te han traído ser tan caprichoso y has visto otro mundo diferente a este. Además vas a ser famoso porque has sido el segundo conejo que ha ido al espacio.
-Gracias por tu amabilidad y por no haberte enfadado conmigo.
Andreola fue famoso por el mundo entero. Ahora vive en un enorme castillo hecho de piedra junto con su familia, su esposa y su gazapito.