EL TORO
Había una vez un toro que se le rompió el cuerno porque se chocó contra la pared y estuvo un año sin el cuerno. Los pastores veían que lo tenían que matar y entonces lo mataron.
EL LÁPIZ Y EL BOLÍGRAFO
Había una vez un lápiz y un bolígrafo que vivían en una ciudad muy grande. Un día fueron a la playa y el bolígrafo se metió al agua, entonces un tiburón le cogió de la pierna y se la rompió. Fue al hospital y le atendió una enfermera bolígrafo. Cuando le curó él se enamoró de ella y se casaron.
LA BOTELLA
Había una vez una botella que no tenia agua. Un niño la cogió, la llenó de agua, la dejó y se le evaporó el agua.
Otro niño la cogió y la llenaba todos los días. La botella vivió feliz.
LA PELOTA Y EL BALÓN
Había una vez una pelota y un balón que quería ser tan grande como el balón y no podía.
Un día llegó un payaso al pueblo donde vivía la pelota y le pidió que le convirtiera en balón pero no lo hizo.
Otro día fue un títere y tampoco lo consiguió.
El tercer día un duende tampoco lo consiguió.
El cuarto día un pirata le engañó a la pelota y la encogió.
El quinto día, un extraterreste tampoco.
La pelota y el balón se fueron al país de las hadas y un hada le convirtió en balón.
Se fueron a su casa y empezaron a botar por las camas.
BENIDORM
Una familia fue de vacaciones a Benidorm. Todos los días se bañaban en la playa. Un día fueron a la playa y no había agua. Se fueron a la piscina y no les gustaba. Un hombre llenó la playa y al día siguiente todos se bañaron y se lo pasaron muy bien.
LOS REYES MAGOS
Hoy vienen los Reyes Magos . Un niño quería un coche de playmobil . Después de cenar se fue a la cama. A la mañana siguiente se despertó y no estaba el coche debajo del árbol, miró debajo del coche de su padre y estaba ahí. Se alegró mucho.
Hola a tod@s:
He estado visitando vuestro blog; me ha parecido muy interesante. Me da la sensación de que con él además de aprender os divertís. Me ha gustado mucho la entrada de las trampas para cazar; me ha recordado cuando éramos chavales e íbamos a coger cardelinas en Tafalla. Y los roscos de pasabalabra, que por cierto no son nada fáciles. Un abrazo a tod@s, seguid así.
Manolo Ibáñez, del CAP